¡Navidad, Navidad,...obscena Navidad!

Este último ha sido bastante ajetreado y estresante en la tienda a causa de las fiestas navideñas.

Llegan las postales de Navidad y con ello la gente que las compra compulsivamente, y en grandes cantidades, para acompañar sus regalos navideños. Por eso pensé en escribir un artículo especial sobre las tarjetas navideñas más divertidas, pero también insultantes y obscenas. Una buena excusa para actualizar el blog que está bastante abandonado, muy a mi pesar. El problema es que, al parecer, el tabloide The Daily Mail ya se me ha adelantado y con intenciones bastante diferentes. 

El pasado miércoles 17 de diciembre al llegar a la tienda a cumplir con mi turno, mi compañera Lucinda me comenta que ha llamado Gemma, la responsable última de todas las tiendas, pidiendo que reorganizara las postales de contenido sexual o con un lenguaje poco adecuado para los niños, para que quedaran más camufladas en las estanterías. Al preguntare porque, pues ya de por sí siempre ponemos este tipo de postales en las zonas más altas para que no quede a la altura visual de los pequeños, me cuenta que The Daily Mail, que por cierto tiene bastante mala reputación, había publicado un artículo denunciando, más que informando, que vendíamos postales de alto contenido sexual y anticristianas. Muy anticristianas. 

El artículo viene a titularse como "mensajes sexuales, profanos y anticristianos a la vista de los niños ". Reconozco que muchas de las postales me parecen, personalmente, muy ofensivas. Quizás es porque en España no estamos acostumbrados a este tipo de humor explícito, y mucho menos a la hora de felicitar la Navidad que para mucha gente es una fiesta solemne. Pero en Reino Unido es tan habitual, que son las postales más vendidas de la tienda. No es raro escuchar a gente reírse a carcajadas en la tienda mientras leen los chistes escritos en las tarjetas. 

Lo que más me llamó la atención del artículo, y me tocó la moral, no es que despotricara sobre el tipo de postales que incide, de forma muy repetitiva, que son un insulto al cristianismo y un mal ejemplo para los niños. Me molestó saber que John Procter, el dueño y fundador de la empresa y que es entrevistado en este artículo, tiene una mansión en Dorset, una población famosa por sus quesos, valorada en casi dos millones de libras y un apartamento de lujo en pleno centro londinense. Me molestó sobremanera porque desde las oficinas centrales siempre se quejan de que la tienda no hace suficiente dinero, y sólo nos dan un dinero extra en navidad, en mi caso son 180 libras, si llegamos al objetivo económico. Una miseria comparado con todo el dinero que posee el "jefe supremo" de la empresa. Sea como fuere, el diario no se dio por vencido. 

Al día siguiente, el mismo tabloide publicó otro artículo bajo el título "Imaginen que estas postales se rieran del Islam". 

Este tipo de postales son las que se encontraban en nuestra tienda. Los insultos como "fuck" han sido emborronados por el periódico. Fuente: They Daily Mail.

De forma muy resumida, éste último artículo el periodista se pregunta si el dueño de la tienda vendería postales que hicieran mofa del Islam. Sea verdad o no lo que dicen, les conmino a que lean los artículos porque creo que las críticas que hacen son interesantes, aunque exageradas desde mi punto de vista. Después de casi tres años trabajando en este país, creo que conozco bastante bien su sentido del humor para saber que a la gente no les molesta tanto este tipo de bromas en postales.

Por suerte, el ajetreo de las fiestas navideñas ya ha acabado, yo he vuelto de mis vacaciones en familia en mi ciudad, Barcelona, y ahora toca volver al trabajo y preparar todo lo que no se ha vendido en Navidad para devolverlo al almacén. Curiosamente, las postales con este tipo de lenguaje e insultos han sido los menos vendidos ¿Habrá tenido algo que ver The Daily Mail?





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